Sparx Logistics, operador especializado en la industria de transporte internacional de carga, lideró el inédito traslado, en una operación de alta complejidad que combinó transporte terrestre, aéreo y aduanero, bajo estrictos estándares internacionales.
Tras más de un año y medio de preparación, Atanasio, el primer rinoceronte blanco nacido en Chile, viajó hacia Brasil, en el marco de un proyecto de conservación de especies amenazadas en Sudamérica. Sparx Logistics, operador logístico especializado, lideró el inédito traslado en una operación de alta complejidad que combinó transporte terrestre, aéreo y aduanero bajo estrictos estándares internacionales.
El ejemplar, proveniente del Bioparque BuinZoo, viajó el martes 2 de diciembre rumbo al Zooparque de Itatiba (São Paulo), en un operativo que también contó con la colaboración de LATAM Cargo y diversas autoridades de ambos países.
Una operación inédita y altamente regulada
El proyecto —dirigido integralmente por Sparx— requirió coordinar múltiples autorizaciones y normativas. Al tratarse de una especie protegida por la Convención CITES, el traslado exigió permisos de exportación e importación tanto de Chile como de Brasil, además de certificados zoosanitarios y autorizaciones ambientales y aduaneras. Adicionalmente, el transporte aéreo debía cumplir con la normativa internacional IATA Live Animals Regulations, que define el tipo de contenedor permitido, la ventilación, las condiciones térmicas y los tiempos máximos de exposición durante el vuelo.
“Lo más relevante para nosotros fue traducir ese marco regulatorio en un plan logístico viable, seguro y sin fricciones. Nuestro rol como operador logístico experto es articular instituciones, especialistas y equipos técnicos bajo un mismo diseño operativo, asegurando que cada decisión priorice el bienestar del animal”, explicó Juan Manuel Rojas CEO global de Sparx.
Durante el proceso, la compañía también facilitó la interlocución con la Embajada de Brasil y con organismos regulatorios para acelerar revisiones clave y asegurar que cada documento estuviera aprobado en los plazos exigidos.
Coordinación técnica y control minuto a minuto
Desde el punto de vista operativo, Sparx lideró la planificación y supervisión de los procesos aduaneros en origen y destino, así como el diseño, construcción y mantención del contenedor especializado: una jaula completamente metálica de 3,65 m de largo, 1,65 m de ancho y 2,00 m de alto, diseñada para sostener el peso, comportamiento y necesidades de Atanasio.
Cada fase del trayecto fue definida con foco en reducir al mínimo movimientos, tiempos de espera y variaciones ambientales que pudieran generar estrés. Para ello, el equipo de Sparx trabajó de manera estrecha con el equipo veterinario del Bioparque BuinZoo, que definió rutinas de descanso, hidratación, control de temperatura y manejo del estrés, ajustando la operación minuto a minuto según su evaluación del comportamiento del animal.
“Una operación así no se puede improvisar: requiere planificación milimétrica, capacidad técnica en terreno y equipos altamente especializados. Nuestro compromiso es asegurar que cada metro del recorrido esté diseñado para proteger al animal”, añadió Juan Manuel Rojas.
Un trayecto de más de 2.600 kilómetros
El recorrido total consideró el traslado escoltado desde BuinZoo al Aeropuerto de Santiago, el vuelo carguero a Viracopos (Campinas) y un último tramo terrestre hasta el Zooparque de Itatiba. En total, el viaje tomó alrededor de 16 horas y media y superó los 2.600 kilómetros.
Durante todo el trayecto —carga, inspecciones, tránsito y descarga— se realizaron controles veterinarios permanentes para monitorear hidratación, temperatura corporal y nivel de estrés. Los entrenamientos previos realizados por el Bioparque y Sparx Logistics permitieron que Atanasio reconociera voces, olores y el contenedor como un espacio seguro, facilitando cada maniobra crítica.
Instituciones involucradas
La operación requirió la coordinación de un amplio ecosistema institucional.
En Chile, participaron el SAG, Aduanas, DGAC, operadores y almacenes del aeropuerto, además de BuinZoo. En Brasil, los principales actores fueron IBAMA, Aduanas, la administración del aeropuerto de destino y el Zooparque de Itatiba. LATAM Cargo lideró el componente aéreo cumpliendo con estándares IATA.
Asimismo, Sparx estuvo a cargo de articular a todos estos actores bajo un solo plan logístico, asegurando consistencia regulatoria, tiempos eficientes y un foco permanente en el bienestar del animal.














































