Durante 2022 el comercio electrónico chileno registró un descenso de ventas, debido a factores, principalmente relacionados a la crisis económica e inflacionaria y al retorno de la normalidad comercial. Atrás queda el boom pandémico y, en vista del nuevo escenario, la competitividad y la competencia de los comercios online debe ser revisada a fin de que el negocio digital mantenga su rentabilidad.
A partir de 2020, a raíz de la Pandemia del Covid-19, las ventas del comercio electrónico en Chile experimentaron un crecimiento exponencial. Las cifras oficiales así lo confirman. De acuerdo a las estadísticas y proyecciones publicadas por la Cámara de Comercio de Santiago, en términos reales, las ventas online B2C en 2019 alcanzaron los US$ 6.079 millones de dólares, registrando un nivel de participación (penetración) en las ventas minoristas del 7,4%; mientras que para el cierre de 2022 se proyecta un total de ventas de, aproximadamente, US$ 11.010 millones de dólares, con un incremento del 1,7% en el nivel de penetración en las ventas minoristas, respecto de 2021 (13%), un margen de proyección menor al esperado, debido a la actual recesión económica.