Es sabido que las operaciones de comercio exterior y de abastecimiento interno en el país seguirán afectadas por el contexto internacional, aún sometido a los vaivenes de la pandemia. En esta línea, factores como la escasez de contenedores y la constante alza de los fletes navieros, se proyectan como permanentes en los meses venideros, de hecho, según los expertos las tarifas del transporte marítimo de contenedores no se normalizará en el mediano plazo, afectando a importadores y exportadores, y -por cierto- a los consumidores finales.
“Prepararse”, esa parece ser la consigna para enfrentar este 2022. Si bien, muchos creen que los grandes cambios y los reajustes en la industria logística impulsados por el Covid-19 ya se vivieron; aún quedan aspectos que mantienen en vilo a la cadena de suministro sobre todo por las dificultades que ha tenido el transporte marítimo. ¿Cómo enfrentar este 2022?