Con la llegada de las Fiestas Patrias, la industria logística nacional se prepara para enfrentar uno de los periodos más exigentes del año. EIT Logística, empresa líder en el rubro, detalla el impacto que los días feriados tienen en el transporte y la distribución de carga, destacando la necesidad de una planificación rigurosa y la implementación de medidas de seguridad adicionales.
Según Patricio Fernandez, gerente de Transportes de EIT Logística, el principal impacto es la sobrecarga operativa. "Las Fiestas Patrias generan siempre un efecto muy marcado en la logística nacional. La demanda de transporte puede aumentar entre un 25% y 40% respecto a una semana normal, dependiendo del rubro. Esto nos obliga a redoblar turnos, reforzar la flota y ajustar la planificación de rutas para absorber el volumen en un período muy acotado", explica.
El vocero añade que la operación en días feriados implica mayores costos laborales debido a los recargos legales y bonos especiales para mantener la continuidad operacional. "Un tercer aspecto, menos visible pero muy relevante, es la motivación del equipo humano. Nuestros conductores y operarios también quieren disfrutar de las celebraciones; si no gestionamos bien los descansos y la rotación, se genera un desgaste que repercute en productividad y clima laboral", señala Fernández.
¿Qué pasa con la seguridad?
Un desafío crítico es la seguridad. Durante estas fechas, los desplazamientos en carreteras aumentan significativamente, incrementando también los riesgos de congestión, accidentes y, en algunos corredores, intentos de robo. "Todo esto hace que septiembre sea uno de los meses más exigentes para la industria logística", enfatiza el gerente de operaciones.
Para mitigar las “complejidades logísticas", la planificación anticipada es la clave. Ignacio Torrealba, Key Acoount de EIT Logística, explica: "Desde fines de agosto empezamos a acomodar agendas del personal, definir turnos y programar vacaciones para asegurar disponibilidad en los días críticos. Paralelamente, se refuerza la coordinación con clientes, ajustando calendarios de entrega y negociando ventanas de despacho más amplias para evitar cuellos de botella".
Torrealba destaca que también deben asumir costos adicionales, tanto en personal como en el arriendo de equipos externos, para sostener el servicio sin interrupciones. En cuanto a la seguridad, el vocero agrega: "Reforzamos escoltas en zonas de mayor riesgo, aumentamos el monitoreo satelital de la flota y realizamos campañas internas de conducción segura. En septiembre no solo movemos carga, sino que desplegamos una estrategia integral de contingencia que combina flexibilidad operativa, inversión en seguridad y gestión humana".