Desde una guerra en Europa que disparó los precios de la energía, hasta una crisis logística en el mar Rojo que reconfigura las rutas navieras del mundo. Desde la inflación que afecta el consumo en América Latina, hasta eventos climáticos extremos que paralizan puertos y centros de distribución. Hoy, la cadena de suministro ya no se gestiona solo desde el centro de distribución: se navega en tiempo real desde un tablero global cada vez más inestable y desafiante.
En fechas clave como Navidad, el regreso a clases, el Día de la Madre o Fiestas Patrias, la logística se convierte en un factor crítico para el éxito comercial. La demanda se dispara, los tiempos se acortan y la presión sobre la operación crece exponencialmente. En este escenario, ¿Qué necesitan las empresas para superar con éxito estos periodos críticos y transformar el peak en una ventaja competitiva?