Seguro ha escuchado más de una vez la frase, “lo que no se mide no se puede mejorar”. Pues bien, a nivel empresarial esta máxima es clave para alcanzar mayores niveles de rentabilidad, lo que por cierto aplica al negocio eCommerce que también debe medir su performance para ganar.
Ad portas de 2024, resulta crucial abordar los cambios en el comportamiento de los consumidores y la evolución de sus expectativas, a fin de que las empresas puedan adaptarse de forma proactiva a sus exigencias y obtener ventajas competitivas de cara a los próximos meses.
De la misma manera en que el comercio B2C ha avanzado hacia la transformación digital, es necesario que el comercio B2B entienda la necesidad de realizarlo, considerando las diferencias que pueden tener, en términos de estrategias y herramientas de omnicanalidad necesarias para lograr arquitecturas robustas que permitan una operación unificada.
¿Quiero devolver este producto? Esta frase abre un mundo de desafíos para las empresas de comercio minorista tradicional y online (retailers y e-Tailers). Esta acción del consumidor genera un escenario cambiante y disruptivo para las compañías que afecta, en distintos niveles, no sólo su estrategia comercial y operativa logística, sino también la relación con sus clientes.
En un entorno económico dinámico y competitivo, el sector minorista enfrenta desafíos constantes para mantener su relevancia y prosperar en un mercado en constante cambio. El reconocimiento de la búsqueda de innovación, de la expansión del modelo de negocios y del desarrollo de nuevos canales de venta han marcado las últimas décadas de la industria, donde la experiencia de compra y el nivel de satisfacción de los clientes ha sido y es la piedra angular del crecimiento y posicionamiento del retail.
“Dónde comprar el producto? ¿Dónde lo puedo recibir? ¿el producto estará en Internet? ¿En Internet tendrá el mismo valor? Estas son algunas de las interrogantes que día a día se hacen millones de consumidores al momento de adquirir un producto. Sin embargo, una estrategia se ha presentado, en los últimos años, como la respuesta a estas preguntas: la omnicanalidad logística llegó a definir la forma en que las empresas interactúan con sus clientes, a través del servicio y el comercio.
En esta ocasión hemos analizado el mundo de las entregas, el cual ha crecido enormemente y se transforma hoy en un factor clave en el éxito de las compañías y en el vínculo que entablan con sus clientes. Si bien, las cifras de movimiento han disminuido en los últimos meses, el alcance de esta operación y sus niveles de crecimiento lo hacen un mercado atractivo para los actores del delivery.
Desde hace algunos meses, la Inteligencia Artificial (IA) se ha colado con más fuerza en el lenguaje de los negocios debido a la eficiencia que ha mostrado para ciertas tareas. Por ejemplo, uno de estos programas puede analizar cantidades enormes de datos, procesarlos y determinar un resultado en tiempo récord con base en la información que se le proporciona.
El ecommerce ha tomado los mercados nacionales e internacionales; de hecho, cada vez son más las personas que se suman a esta forma de emprendimiento que ofrece tantos beneficios, sin necesidad de grandes inversiones. Desarrollar una empresa digital es cada vez más fácil debido al amplio catálogo de herramientas y plataformas digitales que existen para ello. El internet y las redes sociales han generado cambios en las formas de consumo de las personas, quienes ahora, con tan solo unos cuantos clics en su computador, solicitan diferentes productos y servicios, los cuales esperan que lleguen en las mejores condiciones y en el tiempo establecido hasta la puerta de sus casas.
Las organizaciones hoy deben trabajar en cómo maximizar el espacio en los centros de distribución, pero sobretodo en los micro centros logísticos - Microhubs urbanos, así como el desafío de resolver la gestión de inventario y el Fulfillment (Cumplimiento) para la entrega rápida de pedidos en línea.
Durante 2022 el comercio electrónico chileno registró un descenso de ventas, debido a factores, principalmente relacionados a la crisis económica e inflacionaria y al retorno de la normalidad comercial. Atrás queda el boom pandémico y, en vista del nuevo escenario, la competitividad y la competencia de los comercios online debe ser revisada a fin de que el negocio digital mantenga su rentabilidad.