Durante los últimos tres años, expertos de diversas latitudes se han dado a la tarea de analizar ampliamente la evolución y la resiliencia que las cadenas de suministro y la actividad logística ha experimentado a partir del evento disruptor más importante del siglo XXI: la Pandemia del Covid-19; evento que vino a exhibir las debilidades del modelo logístico pre pandémico e instaló a nivel global, la necesidad de transformar y robustecer las cadenas de suministro globales, poniendo en perspectiva nuevos retos, tales como: la sustentabilidad, la visibilidad end to end, la gestión del riesgo y la digitalización y automatización de procesos.
Durante los últimos tres años, la Distribución Urbana de Mercancías (DUM) en Chile (y el mundo) ha experimentado importantes cambios que deben ser abordados de forma colaborativa entre los actores públicos y privados, a fin de delimitar los efectos nocivos de su acción y, al mismo tiempo, permitir su desarrollo eficiente y seguro, toda vez que se trata de una actividad estratégica y crítica para la supervivencia de las urbes.